Estados Unidos anunció este viernes sanciones contra 500 empresas e individuos con el objetivo principal de minar la infraestructura financiera del Gobierno de Vladímir Putin, entre ellas a 26 compañías extranjeras que ayudan a Rusia a evadir sanciones.
Este es el mayor número de sanciones impuestas desde la invasión de Ucrania por parte de Rusia y coincide con el segundo aniversario del comienzo de la guerra y tras la reciente muerte del opositor ruso Alexéi Navalni.
El Departamento del Tesoro sanciona a cerca de 300 personas y entidades, mientras que el Departamento de Comercio suma 90 empresas a la batería de sanciones y el Departamento de Estado señala a más de 250 entidades e individuos
La Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro explicó que con las sanciones se busca apuntar a la infraestructura financiera central de Rusia y que para ello se sanciona el operador del Sistema Nacional de Pago Mir, así como a bancos, empresas de inversión y empresas de tecnología financiera rusas.
Entre los sancionados está, por tanto, la Sociedad Anónima del Sistema Nacional de Tarjetas de Pago (NSPK), que es el operador estatal del Sistema Nacional de Pago Mir de Rusia, entidad propiedad del Banco Central de Rusia que «desempeña un papel clave a la hora de facilitar las transacciones financieras tanto internas como externas de Rusia».
A través de un comunicado, el Tesoro advirtió también que Estados Unidos intentará endurecer el «límite de precios» al petróleo ruso existente en la actualidad, que exige que los compradores compren petróleo ruso a una tasa de descuento, bajo la amenaza de sanciones financieras a aquellos que las eviten.
Además de financieras, hay empresas de otros sectores que van desde la logística, la tecnología o incluso la exportación de diamantes, además de objetivos relacionados con la defensa, otro de los principales propósitos de esta tanda de sanciones.
Por ejemplo, la acción de hoy también apunta a la red a través de la cual Rusia ha adquirido y producido vehículos aéreos no tripulados, conocidos como ‘drones kamikaze’, a través de la colaboración con el Ministerio de Defensa y Logística de las Fuerzas Armadas de Irán (MODAFL).
«Las acciones de hoy continúan la campaña del Tesoro para perturbar y degradar la base militar-industrial de Rusia, con un enfoque en la fabricación de tecnología avanzada», señala.
Hay implicadas compañías que van desde la fabricación de máquinas industriales CNC, que se utilizan en las industrias de construcción de maquinaria pesada y de fabricación de armas, hasta la creación de impresoras 3D especiales para la producción de vehículos aéreos no tripulados, piezas de aviones y otros artículos relacionados con el ejército.
La ola de sanciones no implica sólo a compañías rusas sino que también afecta a un total de 26 compañías y ciudadanos de terceros países de lugares como China, Serbia, Alemania, Liechtenstein o Emiratos Árabes Unidos, con el objetivo de «negar a Rusia los recursos necesarios para apoyar su brutal guerra contra Ucrania», señala el Tesoro.
Entre ellas hay transbordadoras de tecnología, equipos y repuestos a Rusia; un agente de carga involucrado en envíos de armas a Rusia y una red transnacional de lavado de dinero que facilita el movimiento ilícito de metales preciosos de origen ruso.
La OFAC, advirtió, seguirá imponiendo sanciones a personas, «dondequiera que se encuentren, que permitan a Rusia volver a conectarse a los mercados financieros globales utilizando canales ilícitos».
Las acciones del Tesoro buscan restringir la capacidad de Rusia de generar los ingresos que necesita para financiar su guerra y «perturbar los esfuerzos del Kremlin por construir una economía en tiempos de guerra», apunta el comunicado.
EFE